Dado que el primer día de visita a la ciudad de Middeheim no hubo que lamentar ningún exceso de violencia gratuita e innecesaria, se puede decir que el desarrollo de los acontecimientos fue más que aceptable, dada la costumbre de acabar sembrando catastróficas desdichas allá por donde pasan nuestros protagonistas.
Nuestro grupo ya había tomado contacto con la urbe y el Middenheimés común, además de sacar algo sobre los días de carnaval, pero no había que dormirse, y aún tenían tiempo de investigar un poco mas, y planear sus próximos movimientos de cara a descubrir al abyecto, vil, e infecto sectario que se escondía entre la crema de la sociedad. Pero dejemos paso a Karin para que continue con la narración...
21 de Sommerzeit. FESTAG!
Desayunamos unos frutos secos, que eso del ayuno no va con
nosotros, y seguimos con nuestro paseo de reconocimiento por la ciudad.
Para empezar nos enteramos de que el fin del sitio que celebra el Carnaval fue
en 1812, tras la guerra civil que se inició con la Guerra de los 3 Emperadores.
Entonces Middenland era propiedad de otros, y los propios Middenlandeses
sitiaron la ciudad de Middenheim.
Magmar, Viktor y yo, Karin, comenzamos la mañana acercándonos
a “El Foso”, en Altquartier, donde descubrimos que había algunos pocos ogros
viviendo en dicho barrio.
Finálmente llegamos al local en cuestión dando gracias de no haber recibido una paliza por el camino y perdido las carteras, porque dadas las pintas del barrio y de la gente que había por allí…
Sí, por que esos modafokas son muy suyos en lo que respecta al barrio. |
El lugar se encontraba
cerrado, sin embargo, fuera del mismo un borracho treintañero llamado Kort nos
habló del dueño del local: Fritz. También nos contó que todo el Gremio de
Ingenieros estaba de mala leche, por los impuestos, al igual que los hechiceros.
Por otro lado, Al y Arty se acercaron al Templo de Ulric, un
edificio mezcla de castillo y catedral, con una enorme estatua del dios, mucho
eco y un llamativo fuego enorme en el altar: la leyenda cuenta que un golpe del
propio Ulric con su martillo fue lo que inició esa fogata donde luego se erigió
el templo, y él mismo sentenció “Mientras esta llama perdure, la ciudad
perdurará”. Todo un punto de peregrinación para muchos.
Albretch consiguió llamar la atención de un sacerdote, que
resultó ser el encargado de la Casa del Saber, y se prestó a hablarles sobre la
vida y milagros de Ulric además de dejarles entrar en la enorme biblioteca del
lugar. Allí recopilaron algo más de información interesante:
- Arthur fue el primero en ver la Fauslag, la montaña sobre la que está la
ciudad, y el que le puso su nombre, que significa “Puñetazo”. Los enanos
ayudaron a los humanos a crear la fortaleza para mantener seguros los bosques y
minas cercanas a la Fauslag.
- Muchos hechiceros también ayudaron a reforzar la defensa de la ciudad.
- Muchos hechiceros también ayudaron a reforzar la defensa de la ciudad.
- Los sacerdotes ulritas están en contra del impuesto. Pero
no pueden decir nada porque ni siquiera el propio Al Ulric ha hecho
declaraciones al respecto.
- El Caballero Eterno, gran campeón de la ciudad, es un cargo que llegó a partir de una cédula de la misma: El Graf Erich mandó a sus mejores hombres de armas al bosque para que solo regresase el mejor de ellos, y ese fue Siegfried llevando en las manos la cabeza de un Señor del Caos.
Fue nombrado “Caballero Eterno” y vestido con una armadura blanca mágica. El actual “Caballero Eterno” de Middenheim es Siegfried Prunkvoll. Éstos son nombrados por el Graf y la gente rumorea que siempre es el mismo hombre pero con diferente cuerpo.
- El Caballero Eterno, gran campeón de la ciudad, es un cargo que llegó a partir de una cédula de la misma: El Graf Erich mandó a sus mejores hombres de armas al bosque para que solo regresase el mejor de ellos, y ese fue Siegfried llevando en las manos la cabeza de un Señor del Caos.
Fue nombrado “Caballero Eterno” y vestido con una armadura blanca mágica. El actual “Caballero Eterno” de Middenheim es Siegfried Prunkvoll. Éstos son nombrados por el Graf y la gente rumorea que siempre es el mismo hombre pero con diferente cuerpo.
- Apenas hay mutantes en Middenheim y la razón es todo un misterio,
aunque por todos es sabido que ocultar a uno de ellos en la ciudad es delito,
ya que el Graf ha dejado claro que no piensa seguir el edicto del Emperador.
- La convivencia allí entre sigmaritas y ulritas siempre ha
sido tensa pero pacífica. El Sumo Sacerdote sigmarita y Gran capitular de Nordland es Werner Stols. Él es
el encargado del Templo de Sigmar en la ciudad y se sabe que disfruta del favor
del Gran Teogonista, por lo cual los ulritas creen que se trata de un espía del
Gran Teogonista que solo malmete entre el Graf Boris y Al Ulric.
Con todos estos datos, nuestras sospechas se acrecentaron: Nos da la sensación de que con los 3 impuestos actuales lo que se quiere conseguir es dejar la ciudad sin nadie que la defienda o proteja: Ni enanos, ni magos, ni sacerdotes.
Desde luego no se puede negar, que la situación es mas sospechosa que la relación entre Batman y Robin. |
Más tarde, tras el 2ª desayuno halfling, Magmar, Viktor y Karin volvimos a “El Foso” y lo encontramos abierto. Viktor preguntó al enorme camarero de casi 2 metros por alguien que vendiera hierbas “medicinales” y este le habló de Bruno, un asiduo del local. También nos habló de un tal Josef, un chivato que conocía asuntos de palacio, pero cobraba por darlos a conocer. El camarero calló como un muerto tras soltar el nombre pero por allí andaba el borracho de Kort, y nos citó en el Parque de Morr (cementerio) por la noche si realmente queríamos hablar con ese Josef, por 2 monedas de oro.
Abandonando el barrio pasamos junto a “El Hogar Ardiente”, un restaurante de auténtica comida halfling decorado como una casita de La Asamblea,el terriorio halfling. El propietario que nos recibió, era un rechoncho halfling llamado Silas Colinaverde que parecía ser un chef con renombre. Al hablarle de Chema Baya se emocionó y nos ganamos algo su confianza, pues luego nos contó que hacía poco se supo de una pelea en “Las Armas del Templario” entre religiosos, porque los sigmaritas acusaron a Al Ulric de imponer el impuesto sobre templos.
Y ya de vuelta a nuestro carro vimos a un grupo de teatro proveniente de Bretonia
montando un buen escenario, anunciando
espectáculos como “En el nombre de la Orquídea” o “Tú a Kislev y yo a Nuln”.
Nuestra ntención era proceder despues de comer, a investigar más lo que se
pueda antes de nuestra cita con Kort y Josef.
Bueno bueno bueno... lo de que la ciudad perdurará mientras perdure la hoguera del Templo de Ulric habrá que verlo, que según supimos de esa leyenda, también supimos que veríamos cómo se desmoronaba con lo que quiera que se esté cociendo en Middenheim.
ResponderEliminarY respecto a la historia de la costrucción de la ciudad y a quiénes van dirigidos los nuevos impuestos, es muy pero que muy sospechoso... nos vamos a quedar los 4 tontos de siempre a comernos los marrones XD.