Con todos ustedes, el primer resumen de la campaña El Enemigo Interior, escrito por Leti, y con algún chascarrillo y comentario añadido por quien perpetra este blog.
24 de Jahdrung, Festag por supuesto (lo que viene siendo “día de fiesta” de toda la vida, aiba pues).
Nuestro viaje no dio comienzo muy bien: acabábamos de perder la diligencia (el autobús interprovincial) que nos debía llevar a Altdorf, en donde teníamos intención de presentarnos a una buena oferta de trabajo ofrecida por el Príncipe Von Tasseninck, motivo por el que nos conocimos durante el viaje a la capital del Imperio. Y cuando digo buena es muy buena: una remuneración estupenda y diaria, unos viajecitos pagados… y algo de peligrosidad, pero bah, nada que no pudieramos hacer nosotros.
El caso es que hasta el día siguiente no tendriamos otra diligencia y por no andar de noche por esos caminos poco seguros nos metimos en la posada de la siguiente posta o parada. Nuestro amigo Arty, el único humano del grupo, junto con Magmar se dedicaron a parlotear con los cocheros de la diligencia que estaban más pedo que Alfredo porque les daban de comer y beber por la patilla (y por la rentabilidad del negocio). Para nuestra desgracia nos informaron de que la diligencia iba casi llena y no tendríamos sitio para todos… Así que tocaba esperar, ir separados o ingeniárselas para viajar a Altdorf en ese primer autobús del día siguiente.
Mientras tanto, Ragnar, Viktor y yo, Karin, cenábamos tranquilamente, aunque el enano se dedicaba más al bebercio que al comercio, hinchándose a cerveza. En una de esas la pequeña halfling consiguió echarle agua a la cerveza del enano para no tener que aguantar su resaca el día siguiente, con el consiguiente enfado de este, lo que provocó que Ragnar enfadado, persiguiera a Karin con intención de que ella se bebiera ahora una jarra entera de cerveza, que Viktor persiguiera a Ragnar para impedir que alcoholizara a su hermana pequeña y uno de los cocheros se sumara a la conga de Jalisco, porque quería echar un pulso con el primero de la fila, que lo había dejado tirado después de retarlo.
Nuestro viaje no dio comienzo muy bien: acabábamos de perder la diligencia (el autobús interprovincial) que nos debía llevar a Altdorf, en donde teníamos intención de presentarnos a una buena oferta de trabajo ofrecida por el Príncipe Von Tasseninck, motivo por el que nos conocimos durante el viaje a la capital del Imperio. Y cuando digo buena es muy buena: una remuneración estupenda y diaria, unos viajecitos pagados… y algo de peligrosidad, pero bah, nada que no pudieramos hacer nosotros.
El caso es que hasta el día siguiente no tendriamos otra diligencia y por no andar de noche por esos caminos poco seguros nos metimos en la posada de la siguiente posta o parada. Nuestro amigo Arty, el único humano del grupo, junto con Magmar se dedicaron a parlotear con los cocheros de la diligencia que estaban más pedo que Alfredo porque les daban de comer y beber por la patilla (y por la rentabilidad del negocio). Para nuestra desgracia nos informaron de que la diligencia iba casi llena y no tendríamos sitio para todos… Así que tocaba esperar, ir separados o ingeniárselas para viajar a Altdorf en ese primer autobús del día siguiente.
Mientras tanto, Ragnar, Viktor y yo, Karin, cenábamos tranquilamente, aunque el enano se dedicaba más al bebercio que al comercio, hinchándose a cerveza. En una de esas la pequeña halfling consiguió echarle agua a la cerveza del enano para no tener que aguantar su resaca el día siguiente, con el consiguiente enfado de este, lo que provocó que Ragnar enfadado, persiguiera a Karin con intención de que ella se bebiera ahora una jarra entera de cerveza, que Viktor persiguiera a Ragnar para impedir que alcoholizara a su hermana pequeña y uno de los cocheros se sumara a la conga de Jalisco, porque quería echar un pulso con el primero de la fila, que lo había dejado tirado después de retarlo.
No será la última vez que recurramos a esta B.S.O en la campaña.
La carrera cómica terminó cuando Ragnar resbaló sobre la vomitona de uno de los cocheros… y el otro cayo dormido sobre más de lo mismo tras echar un pulso con el enano borracho. El resto nos fuimos a dormir en una cama como las personas decentes, en vez de sobre una mesa de la taberna.
25 de Jahdrung.
Al levantarnos bajamos a la diligencia donde la noble Lady Isolda se quejaba de que “el autobús” ya salía con tardanza y Arty se hizo pasar por uno de los cocheros (poniendo a ambos enanos, Ragnar y Magmar, en el puesto de guardias de seguridad del vehículo) porque los cocheros reales no aparecía (normal, con la resaca que tendrían…). El mover a los caballos no fue tarea fácil y finalmente Arty se tuvo que agenciar con varias zanahorias de la cocina de la posta, atadas a un cordel en el extremo de su pala de sepulturero, para que se movieran poniéndoselas delante de los morros desde el asiento de los cocheros.
Al levantarnos bajamos a la diligencia donde la noble Lady Isolda se quejaba de que “el autobús” ya salía con tardanza y Arty se hizo pasar por uno de los cocheros (poniendo a ambos enanos, Ragnar y Magmar, en el puesto de guardias de seguridad del vehículo) porque los cocheros reales no aparecía (normal, con la resaca que tendrían…). El mover a los caballos no fue tarea fácil y finalmente Arty se tuvo que agenciar con varias zanahorias de la cocina de la posta, atadas a un cordel en el extremo de su pala de sepulturero, para que se movieran poniéndoselas delante de los morros desde el asiento de los cocheros.
Está claro que entre los apellidos de Arty podemos encontrar el de Threepwood. |
Los hermanos halflings por nuestra parte montamos dentro del carruaje junto con Lady Isolda, su doncella y su guardaespaldas (a partir de ahora la nombraremos como “la ogra” por su físico y fuerza), y también un par de hombres: Philippe (más conocido como “el cartas”), un hombre de mundo que parecía ganarse la vida con juegos de cartas, y Ernst (“el libros”, de aspecto culto y que después descubrimos que quería estudiar en la Universidad de Altdorf).
“Soy un inútil pero un inútil completo porque tengo “Buscar”…” (Gorka) |
En un bache del camino una rueda de la diligencia se salió aunque no es de extrañar (claro, que hasta ahora no había dicho nada pero la diligencia era más bien una carraca andante), pero tras un descanso y algo de trabajo logramos entre todos los pasajeros ponerla de nuevo en su sitio. Algunos (especialmente los que viajaban fuera guiando a los caballos) se hicieron pupita al caer desde sus asientos.
Emprendimos el camino y poco después comenzó a llover copiosamente. Pero los sustos no habían hecho más que comenzar tras el percance de hacía un rato, y es que en medio del camino se interpuso una criatura de aspecto desagradable, con la piel en descomposición, y hedor a tumba, aunque se apreciaba que tiempo atrás fue un hombre, y a la que el paso de la diligencia interrumpió en medio del desayuno, puesto que se encontraba devorando una mano humana (cuando hay hambre, hay hambre). El susto fue tal que los caballos se desbocaron, con lo que fueron a parar contra unos árboles, saliendo éstos huyendo del lugar como alma que lleva el Diablo al romperse las sujeciones de la diligencia, mientras esta quedaba empotrada contra los fuertes troncos.
De nuevo conductor y “seguratas” cayeron dolorosamente al suelo y tras incorporarse se libró una batalla bajo la lluvia contra esa criatura. Ragnar parecía conocerlo, ya que lo llamó por su nombre mientras luchaba contra él, pero el ser hacía caso omiso, Philippe ayudaba con su espada a matar al enemigo, Karin estaba tan aterrada que no consiguió salir del interior mientras el resto de las damas gritaban asustadas, Arty y Magmar también pelearon contra el monstruoso ser y finalmente fue Viktor, desde la diligencia, quien propinó el golpe final con una pedrada asestada desde su honda que destrozó el cráneo del enemigo, esparciendo sus sesos entre los más cercanos a él.
Emprendimos el camino y poco después comenzó a llover copiosamente. Pero los sustos no habían hecho más que comenzar tras el percance de hacía un rato, y es que en medio del camino se interpuso una criatura de aspecto desagradable, con la piel en descomposición, y hedor a tumba, aunque se apreciaba que tiempo atrás fue un hombre, y a la que el paso de la diligencia interrumpió en medio del desayuno, puesto que se encontraba devorando una mano humana (cuando hay hambre, hay hambre). El susto fue tal que los caballos se desbocaron, con lo que fueron a parar contra unos árboles, saliendo éstos huyendo del lugar como alma que lleva el Diablo al romperse las sujeciones de la diligencia, mientras esta quedaba empotrada contra los fuertes troncos.
De nuevo conductor y “seguratas” cayeron dolorosamente al suelo y tras incorporarse se libró una batalla bajo la lluvia contra esa criatura. Ragnar parecía conocerlo, ya que lo llamó por su nombre mientras luchaba contra él, pero el ser hacía caso omiso, Philippe ayudaba con su espada a matar al enemigo, Karin estaba tan aterrada que no consiguió salir del interior mientras el resto de las damas gritaban asustadas, Arty y Magmar también pelearon contra el monstruoso ser y finalmente fue Viktor, desde la diligencia, quien propinó el golpe final con una pedrada asestada desde su honda que destrozó el cráneo del enemigo, esparciendo sus sesos entre los más cercanos a él.
Indudablemente el viejo compañero de Ragnar tenía un serio problema de carácter, además del de acné, claro. |
Pero aquello parece que no había hecho más que empezar… Más adelante del camino oímos unos gritos que nos helaron la sangre, pero aún sabedores de que podía ser nuestra muerte nos acercamos a ver qué sucedía por si hubiera algún herido… Y la escena que apareció ante nosotros era digna de una historia de terror: Junto a una diligencia destrozada habían varias criaturas parecidas a la que acabábamos de matar. Un humano con patas de cabra estaba agachado intentando sanar a otro ser con cabeza canina que aullaba de dolor, otra criatura estaba masticando el cadáver de un niño y un último se dedicaba a romper con rabia el vehículo.
Tras una dura pelea en la que esta vez tomamos partido de nuevo todos menos Lady Isolda, sus chicas y “el libros” que habían quedado atrás a salvaguardarse de todo y curar las heridas del accidente, terminamos hechos una mierda, pero continuábamos vivos por lo que indagamos para intentar averiguar qué había sucedido con esa diligencia… lo que nos encontramos desde luego superó lo que podíamos esperar…
Habían varios cadáveres: una pareja con aspecto de artesanos y el que debía ser el hijo de ambos, un sacerdote de Sigmar con su monaguillo y todo, el cochero, y otra sorpresa del día: tras un montón de maderas, un hombre igualito a Arty yacía muerto y con varios papeles entre sus pertenencias. Dichos papeles señalaban a su propietario como heredero de un barón que debía ir a Bogenhafen a solicitar la herencia que le habían dejado, y el otro papel acreditaba por medio de dos personas importantes que el propietario de los papeles era realmente ese tal Kastor Lieberung al que comunicaban ser el heredero, pero que a partir de ese momento pasó a ser nuestro amigo Arty… y es que una millonada y una mansión no se lo dan a uno todos los días… y menos en el Viejo Mundo.
Tras una dura pelea en la que esta vez tomamos partido de nuevo todos menos Lady Isolda, sus chicas y “el libros” que habían quedado atrás a salvaguardarse de todo y curar las heridas del accidente, terminamos hechos una mierda, pero continuábamos vivos por lo que indagamos para intentar averiguar qué había sucedido con esa diligencia… lo que nos encontramos desde luego superó lo que podíamos esperar…
Habían varios cadáveres: una pareja con aspecto de artesanos y el que debía ser el hijo de ambos, un sacerdote de Sigmar con su monaguillo y todo, el cochero, y otra sorpresa del día: tras un montón de maderas, un hombre igualito a Arty yacía muerto y con varios papeles entre sus pertenencias. Dichos papeles señalaban a su propietario como heredero de un barón que debía ir a Bogenhafen a solicitar la herencia que le habían dejado, y el otro papel acreditaba por medio de dos personas importantes que el propietario de los papeles era realmente ese tal Kastor Lieberung al que comunicaban ser el heredero, pero que a partir de ese momento pasó a ser nuestro amigo Arty… y es que una millonada y una mansión no se lo dan a uno todos los días… y menos en el Viejo Mundo.
“Ahora mismo me escupe una ardilla y me hace un crítico” (Gorka) |
Tras la pelea y un rápido vistazo a los cadáveres humanos llegaron unos vigilantes de caminos, pero al ver aquella carnicería (y conseguir de paso que no vean el parecido entre uno de los cadáveres y nuestro Arty) y nuestros aspectos, se adentran en el bosque convencidos por nosotros (erróneamente, claro) de que una de esas criaturas huyó entre los árboles. Hay que saber mentir… cuando los hechos lo requieren.
Ayudado de Magmar, nuestro ladrón de tumbas se dedicó a enterrar a su clon para que no hubieran problemas con los vigilantes si es que volviesen… aunque no lo hicieron antes de que, usando piezas de la diligencia destrozada, arregláramos la nuestra y prosiguieramos el camino bastante malheridos.
Ayudado de Magmar, nuestro ladrón de tumbas se dedicó a enterrar a su clon para que no hubieran problemas con los vigilantes si es que volviesen… aunque no lo hicieron antes de que, usando piezas de la diligencia destrozada, arregláramos la nuestra y prosiguieramos el camino bastante malheridos.
26 de Jahdrung.
Al Rochet de Altdorf solo le falta tener a Ane Igartiburu en nómina, para ser una empresa de viajes como Sigmar manda. |
Llegamos a Altdorf al anochecer, y el dueño de la diligencia y de la empresa de la misma (“El Rochet de Altdorf”) nos agradeció, incluso con dinero, el hecho de que le trajéramos la misma hasta la capital junto a sus pasajeros, a pesar de la indisposición alcohólica de los cocheros reales… o tal vez para que no presentáramos quejas por ello. De modo que cansados, heridos y todavía en shock por lo ocurrido durante el viaje, pasamos la noche en una de las muchas tabernas de la gran ciudad.
Pero antes de acostarnos Arty ( ahora llamado Kastor Lieberung para poder cobrar esa herencia), nos confesó que al llegar a la ciudad se percató de que unos hombres lo miraban extrañados, y como haciéndole señas. Muy misterioso todo oyes.
Pero antes de acostarnos Arty ( ahora llamado Kastor Lieberung para poder cobrar esa herencia), nos confesó que al llegar a la ciudad se percató de que unos hombres lo miraban extrañados, y como haciéndole señas. Muy misterioso todo oyes.
¿Serán los PJ-s capaces de desvelar el misterio? ¿O tendrán que recurrir a esta amable señora? |
27 de Jahdrung.
Tras un despertar como no teníamos desde hacía días y un espléndido desayuno en la posada, pasamos parte del día paseando por la ciudad… y de compras aunque no fuera época de rebajas:
Tras un despertar como no teníamos desde hacía días y un espléndido desayuno en la posada, pasamos parte del día paseando por la ciudad… y de compras aunque no fuera época de rebajas:
Visitamos a un galeno que sanase nuestras heridas, compramos ropa limpia para todos y nuestro Kastor se agenció una ropa elegante y de buena calidad, que la imagen hará mucho si quiere hacerse pasar por heredero de un noble.
Además, comprobamos que el trabajo bien remunerado que ofrecía el Príncipe Von Tasseninck, y motivo por el que todos viajábamos a Altdorf ya había sido dado a otro grupo de aventureros, y éstos habían partido hacia las Montañas Grises junto al príncipe antes de nuestra llegada, de modo que decidimos buscar un modo de poder viajar por vía fluvial hasta Bogenhafen.
Además, comprobamos que el trabajo bien remunerado que ofrecía el Príncipe Von Tasseninck, y motivo por el que todos viajábamos a Altdorf ya había sido dado a otro grupo de aventureros, y éstos habían partido hacia las Montañas Grises junto al príncipe antes de nuestra llegada, de modo que decidimos buscar un modo de poder viajar por vía fluvial hasta Bogenhafen.
Se aceptan apuestas: ¿Cuanto tardarán los PJ-s en hundir el barco del capitán que tenga el valor de llevarlos? |
PIFIAS DEL DÍA:
1 – Ragnar (Igor)
1 – Karin (Leti)
1 – Magmar (Silvia)
1 – DJ Akrabu (Jagoba)
Una que sepamos…
1 – Ragnar (Igor)
1 – Karin (Leti)
1 – Magmar (Silvia)
1 – DJ Akrabu (Jagoba)
Una que sepamos…